concepto
Artrosis
La artrosis de rodilla, también llamada gonartrosis, es una enfermedad degenerativa que afecta a la articulación de la rodilla. Se caracteriza por el desgaste del cartílago, tejido que recubre los huesos y permite que se deslicen suavemente durante el movimiento.
Causas y factores de riesgo:
- Edad: El riesgo aumenta con la edad.
- Sexo: Es más común en mujeres, especialmente después de la menopausia.
- Genética: Predisposición familiar.
- Obesidad: Sobrecarga en las articulaciones.
- Lesiones previas: Fracturas, lesiones de ligamentos, etc.
- Sobrecarga: Deportes de alto impacto, trabajos que requieren arrodillarse o levantar mucho peso.
- Enfermedades metabólicas: Diabetes, gota
Síntomas:
Los síntomas de la artrosis de rodilla pueden variar de persona a persona y pueden incluir:
- Dolor:
- Dolor sordo y profundo en la rodilla.
- Dolor al mover la rodilla, especialmente al subir o bajar escaleras, ponerse de pie después de estar sentado o al caminar durante períodos prolongados.
- Dolor que empeora después de la actividad física o al final del día.
- Dolor que mejora con el reposo.
- Rigidez:
- Sensación de rigidez en la rodilla, especialmente por la mañana o después de un período de inactividad.
- Dificultad para doblar o enderezar completamente la rodilla.
- Inflamación:
- Hinchazón alrededor de la articulación de la rodilla.
- Calor y enrojecimiento en la rodilla.
- Crepitación:
- Sensación de crujido o chasquido al mover la rodilla.
- Deformidad:
- En casos graves, la artrosis de rodilla puede provocar una deformidad de la articulación.
¿Cuáles son las causas de la artrosis de rodilla?
No existe una causa única para la artrosis de rodilla, pero algunos factores que pueden aumentar el riesgo incluyen:
- Edad: El riesgo de artrosis de rodilla aumenta con la edad.
- Sexo: Las mujeres son más propensas a desarrollar artrosis de rodilla que los hombres.
- Genética: La predisposición genética puede aumentar el riesgo de desarrollar la enfermedad.
- Obesidad: El exceso de peso ejerce una presión adicional sobre las articulaciones, lo que puede acelerar el desgaste del cartílago.
- Lesiones previas: Las lesiones de rodilla, como fracturas, desgarros de menisco o lesiones de ligamentos, pueden aumentar el riesgo de desarrollar artrosis de rodilla en el futuro.
- Uso excesivo: El uso excesivo o repetitivo de la articulación de la rodilla, como en deportes de alto impacto o trabajos que implican estar de pie o arrodillarse durante períodos prolongados, puede contribuir al desarrollo de la artrosis.
¿Cómo se previene la artrosis de rodilla?
Si bien no existe una forma segura de prevenir la artrosis de rodilla, algunas medidas pueden ayudar a reducir el riesgo o retrasar su progresión:
- Mantener un peso saludable: Perder peso si tiene sobrepeso u obesidad puede reducir significativamente la presión sobre las articulaciones de las rodillas.
- Hacer ejercicio regularmente: El ejercicio regular ayuda a fortalecer los músculos que rodean la rodilla, lo que proporciona un mejor soporte y estabilidad a la articulación. Los ejercicios de bajo impacto, como nadar, andar en bicicleta o caminar, son ideales para las personas con artrosis de rodilla.
- Evitar las lesiones de rodilla: Use equipo de protección adecuado al practicar deportes y tome precauciones para evitar caídas o lesiones en la rodilla.
- Controlar las enfermedades relacionadas: Controlar las enfermedades que pueden dañar las articulaciones, como la diabetes o la artritis reumatoide, puede ayudar a prevenir la artrosis de rodilla.
Importante: Si experimenta dolor o rigidez persistente en la rodilla, es importante que consulte a un médico para obtener un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento adecuado.